viernes, 30 de diciembre de 2011

MI NOMBRE ES LADRÓN


Mi nombre es “Ladrón”. No se donde nací, ni cuántos años tengo. No conozco a mis padres, tampoco los hecho de menos. He crecido rodeado de gente. Siempre se han acercado a mí por “interés”. Nunca he tenido amigos: más bien socios. Aún así, si les pido algo, lo hacen sin esperar nada “al cambio”.

Con pocos años ya había hecho una gran fortuna con mis negocios. Desde entonces, siempre ha habido quien ha desconfíado de mi. He de decir en su descargo que, ha demostrado ser más inteligente que el resto. Así y todo, siempre he defendido la honorabilidad de mi posición y, por el contrario sí ha habido quién me ha respetado e incluso me ha sentado a su mesa.

No robo cualquier cosa. A mí sólo me gusta el dinero. Aunque he de reconocer que también sustraigo “ilusiones”. Digamos que son daños colaterales. La primera cantidad que timé no la recuerdo, tampoco recuerdo a quién ni en que lugar. Pero no, no creáis que tengo mala memoria. Suelo anotarlo todo por escrito, para no olvidarme de nada, ni de nadie.

Por supuesto, he tenido problemas con la justicia. Nada del otro mundo. Ni que decir tiene que jamás he pisado una cárcel. Como ya os he comentado antes, “he crecido rodeado de geeente”.

Hoy os escribo porque he decidido salir del armario. Toda la vida escondiendo mis verdaderas intenciones. Por fín ha llegado el momento de mostrarlas sin tapujos. Mi verdadero yo. Asi que puedo deciros que debéis estar preparados. Os voy a estafar, timar, quitar, hurtar, afanar, mangar, atracar y sisar. Os despojaré, desvalijaré, defraudaré, usurparé y expoliaré. Voy a dejaros “limpios”. No habrá nada que no apañe, nada de lo que no me apodere, que no asalte o atraque. Rapiñar, saltear, saquear. Ese será mi objetivo. ¿Qué aún no sabéis quien soy? Soy el BANCO MALO.

lunes, 28 de noviembre de 2011

HISPANIA

En el año 33 d.C. cuentan que dos hombres fueron llevados a la presencia del Gobernador de una provincia romana. Ambos acusados de sendos delitos. Después de una deliberación fueron presentados ante el pueblo para que éste con su aprobación, indultara a uno de ellos de morir condenado a la costumbre de la época.

El pueblo, democrática y asambleariamente decidió, creo que por mayoría, no por unanimidad que, el ladrón, el corrupto, fuese indultado de la terrible pena que sobre ambos pesaba.

Dos mil años después, no ha sido el pueblo, ni el gobernador de una provincia romana (aunque como tal se comporte y como tal la traten), sino un gobierno en retirada el que ha indultado, de nuevo, a Barrabás.

Hoy, quien pone la otra mejilla,  a quien crucifican,  es al pueblo.

viernes, 20 de mayo de 2011

NO HAY EXCUSAS

" El domingo 22 de Mayo nos la jugamos. La democracia es...". Podríamos empezar así la entrada, pero lo cierto es que esto no es un juego. No es un juego desde que los dos grandes partidos de este país han elaborado la siguiente paradoja: lo mejor para nuestro bienestar es destruir nuestro estado del bienestar. ¿Irónico verdad?.

Pero si algo han demostrado los acontecimientos de los últimos días es que no hay nada perdido. Todo es posible. Cuando creíamos que vivíamos en una sociedad aletargada, unos jóvenes se encargan de demostrarnos todo lo contrario. Con su dosis de idealismo ( ¡viva la utopía!), no exenta de una realidad nada ajena a nuestras vidas, han logrado movilizar a cientos de miles de personas.

Que nadie mire hacia otro lado. También es una llamada de atención hacia aquellos que, lejos del tamaño de los dos grandes partidos, reproducen no pocas veces su comportamiento. La democracia ha de ser algo vivo: Vitalidad en sus ideas (no sirven recetas de principios de siglo, pueden inspirarnos); vitalidad en su organización, la participación debe ser más directa; vitalidad en la representación, los cargos no son eternos ( y su acumulación entroniza).

Participemos de este despertar. Oídos atentos. Mentes abiertas. Y el domingo, vota en conciencia.

lunes, 16 de mayo de 2011

DEMOCRACIA REAL YA! MANIFIESTO

MANIFIESTO


Somos personas normales y corrientes. Somos como tú: gente que se levanta por las mañanas para estudiar, para trabajar o para buscar trabajo, gente que tiene familia y amigos. Gente que trabaja duro todos los días para vivir y dar un futuro mejor a los que nos rodean.

Unos nos consideramos más progresistas, otros más conservadores. Unos creyentes, otros no. Unos tenemos ideologías bien definidas, otros nos consideramos apolíticos… Pero todos estamos preocupados e indignados por el panorama político, económico y social que vemos a nuestro alrededor. Por la corrupción de los políticos, empresarios, banqueros… Por la indefensión del ciudadano de a pie.

Esta situación nos hace daño a todos diariamente. Pero si todos nos unimos, podemos cambiarla. Es hora de ponerse en movimiento, hora de construir entre todos una sociedad mejor. Por ello sostenemos firmemente lo siguiente:
    * Las prioridades de toda sociedad avanzada han de ser la igualdad, el progreso, la solidaridad, el libre acceso a la cultura, la sostenibilidad ecológica y el desarrollo, el bienestar y la felicidad de las personas.
    * Existen unos derechos básicos que deberían estar cubiertos en estas sociedades: derecho a la vivienda, al trabajo, a la cultura, a la salud, a la educación, a la participación política, al libre desarrollo personal, y derecho al consumo de los bienes necesarios para una vida sana y feliz.
    * El actual funcionamiento de nuestro sistema económico y gubernamental no atiende a estas prioridades y es un obstáculo para el progreso de la humanidad.
    * La democracia parte del pueblo (demos=pueblo; cracia=gobierno) así que el gobierno debe ser del pueblo. Sin embargo, en este país la mayor parte de la clase política ni siquiera nos escucha. Sus funciones deberían ser la de llevar nuestra voz a las instituciones, facilitando la participación política ciudadana mediante cauces directos y procurando el mayor beneficio para el grueso de la sociedad, no la de enriquecerse y medrar a nuestra costa, atendiendo tan sólo a los dictados de los grandes poderes económicos y aferrándose al poder a través de una dictadura partitocrática encabezada por las inamovibles siglas del PPSOE.
    * El ansia y acumulación de poder en unos pocos genera desigualdad, crispación e injusticia, lo cual conduce a la violencia, que rechazamos. El obsoleto y antinatural modelo económico vigente bloquea la maquinaria social en una espiral que se consume a sí misma enriqueciendo a unos pocos y sumiendo en la pobreza y la escasez al resto. Hasta el colapso.
    * La voluntad y fin del sistema es la acumulación de dinero, primándola por encima de la eficacia y el bienestar de la sociedad. Despilfarrando recursos, destruyendo el planeta, generando desempleo y consumidores infelices.
    * Los ciudadanos formamos parte del engranaje de una máquina destinada a enriquecer a una minoría que no sabe ni de nuestras necesidades. Somos anónimos, pero sin nosotros nada de esto existiría, pues nosotros movemos el mundo.
    * Si como sociedad aprendemos a no fiar nuestro futuro a una abstracta rentabilidad económica que nunca redunda en beneficio de la mayoría, podremos eliminar los abusos y carencias que todos sufrimos.
    * Es necesaria una Revolución Ética. Hemos puesto el dinero por encima del Ser Humano y tenemos que ponerlo a nuestro servicio. Somos personas, no productos del mercado. No soy sólo lo que compro, por qué lo compro y a quién se lo compro.

Por todo lo anterior, estoy indignado.
Creo que puedo cambiarlo.
Creo que puedo ayudar.
Sé que unidos podemos.
Sal con nosotros. Es tu derecho.

jueves, 17 de marzo de 2011

LEER ENTRE LINEAS

Hay dirigentes políticos que son como centrales nucleares. Se empeñan en perpetuar su vida útil. Da lo mismo que el clamor de una gran parte de la comunidad (en su caso militantes) aboguen por el cierre de "sus instalaciones".

Al igual que en el caso de estas macrocentrales, sus defensores utilizan  los mismos argumentos: "¿qué sería de la producción eléctrica sin la aportación de éstas?", o lo que es lo mismo "¿qué sería de los proyectos políticos sin su presencia, control y aportación?".

Algunos llevan diciendo muchos años que "Garoña" debe cerrarse. Hoy me he enterado que "Garoña" encabeza la candidatura de Oviedo. ¿Dónde quedan los discursos, la coherencia de quienes les querían poner el candado?...las centrales nucleares  deben seguir en funcionamiento, prolongar su vida "util". No, no les cae la cara de verguenza. Siguen presentes, controlan, "aportan".

Del mismo modo, hay quien ya ni siquiera es consciente de que el armazón del reactor se resquebraja. Aquellos que quieren seguir viviendo de las "nucleares" les hacen de trampolín (cuando no la cama). Y es que el negocio, proporciona sustentos (asesores, gabinetes, direcciones...). ¿Dónde trabajar si toda la vida se han dedicado ha limpiar los conductos de hidrógeno?.

Yo, estoy con las energías renovables. Ojalá venga un soplo de aire fresco, el molino gire, y de paso se los lleve a todos.


sábado, 22 de enero de 2011

A PROPOSITO DE SUSPENSIÓN DEL ACUERDO DE LA IZQUIERDA UNIDA Y EL PSOE EN CASTRILLÓN

Lejos de lo que pudiera parecer, lo que la prensa acuña como "la enésima ruptura de la izquierda en el municipio", no es un hecho que pueda ser analizado con la simpleza de tales argumentos.
Hoy en Castrillón se están jugando bastantes más intereses municipales para los vecinos de los que aparentemente intentan venderse como una nueva cuita más entre dos socios de gobierno que inevitablemente acabarían de esta manera.

Lo que se está dilucidando en nuestro concejo es donde queremos vivir. Cómo queremos que sea Castrillón dentro de unos años, por dónde queremos pasear los vecinos de Salinas, que entendemos por calidad ambiental de nuestro entorno y si entendemos que ello influye sobre nuestra calidad de vida.

Debemos de decidir si dentro de unos años nosotros podemos decir: "evitamos  que se hiciera tal cosa"; o si por el contrario decimos: "ahí había...tú no lo conociste o ya no te acuerdas".

La decisión que Izquierda Unida ha tomado en Castrillón puede ser en un principio incomprendida. Pero se entenderá rápidamente en la medida en que nos abramos esos interrogantes y nos respondamos a ellos.

Desde hace años grupos constructores y otros "grupos" vienen presionando sobre la construcción en determinadas áreas de nuestro territorio. Hasta ahora la lucha contra esos intereses se había dilucidado en el terreno judicial, con no pocos debates de carácter político. La nueva confluencia de esos intereses dentro del pleno de nuestra corporación, requiere el salto hacia nuevas respuestas. Los cambios de criterio han sido tan radicales, como absurdos e incompresibles en la parte "psosialista" del gobierno.

Yo estoy con los que hoy, defienden el derecho de los vecinos y vecinas de Castrillón a un municipio sostenible económica y medioambientalmente hablando. No estoy, con los que defienden derechos urbanísticos particulares o un municipio "sostenible sobre el ladrillo".

Hagamos que las dunas entierren sus intenciones.



CONTRA TODA ESPERANZA, LA ESPERANZA DEL NUEVO AÑO (POR JOSEPH E. STIGLITZ)

NUEVA YORK – Ha llegado el momento de adoptar decisiones para el nuevo año, de reflexionar. Cuando el año anterior no ha ido demasiado bien, es un momento para abrigar la esperanza de que el próximo sea mejor.
Para Europa y los Estados Unidos, el de 2010 fue un año de decepción. Ya han pasado tres años desde el estallido de la burbuja y más de dos desde el desplome de Lehman Brothers. En 2009, dimos un paso atrás al borde de la depresión y 2010 había de ser el año de transición: cuando la economía volviera a ponerse en pie, se podría disminuir suavemente el gasto en estímulo.
Se pensaba que el crecimiento podía aminorarse ligeramente en 2011, pero sería un pequeño bache en el camino a una recuperación sólida. Entonces podríamos volver la vista atrás y considerar la “gran recesión” una pesadilla; la economía de mercado, respaldada por una actuación gubernamental prudente, habría demostrado su resistencia.
En realidad, el de 2010 fue una pesadilla. Las crisis de Irlanda y Grecia pusieron en tela de juicio la viabilidad del euro e hicieron pensar en la posibilidad de una suspensión del pago de la deuda. En los dos lados del Atlántico, el desempleo siguió pertinazmente elevado, en el 10 por ciento, aproximadamente. Aunque el diez por ciento de las familias hipotecadas de los EE.UU. ya habían perdido sus viviendas, el ritmo de las ejecuciones hipotecarias parecía ir en aumento... o habría ido, de no haber sido por la maraña jurídica que inspiró dudas sobre el tan cacareado “Estado de derecho” de los Estados Unidos.
Lamentablemente, las decisiones del nuevo año adoptadas en Europa y en los Estados Unidos fueron erróneas. La reacción ante los fallos y el derroche del sector privado que habían causado la crisis, ¡fue la de pedir austeridad al sector público! La consecuencia será, casi con toda seguridad, una recuperación más lenta e incluso una mayor demora antes de que el desempleo baje hasta niveles aceptables.
También habrá una disminución de la competitividad. Mientras que China ha mantenido en marcha su economía haciendo inversiones en educación, tecnología e infraestructuras, Europa y los Estados Unidos han estado reduciéndolas.
Se ha puesto de moda entre los políticos predicar las virtudes del dolor y del sufrimiento, seguramente porque quienes sufren las consecuencias son quienes apenas tienen voz y voto: los pobres y las generaciones futuras. Para poner en marcha la economía, algunos habrán de sufrir un poco, en efecto, pero la cada vez más sesgada distribución de la renta da una idea clara de quiénes serán: aproximadamente, una cuarta parte de toda la renta de los EE.UU. corresponde al 1 por ciento superior, mientras que la renta de la mayoría de los americanos es inferior hoy a lo que era hace doce años. Dicho de forma sencilla, la mayoría de los americanos no se beneficiaron de lo que muchos llamaron la “gran moderación”, pero fue, en realidad, la “madre de todas las burbujas”. Así, pues, ¿se debe hacer pagar aún más a víctimas inocentes y a quienes nada ganaron de la falsa prosperidad?
Europa y los Estados Unidos tienen las mismas personas con talento, los mismos recursos y el mismo capital que tenían antes de la recesión. Pueden haber valorado excesivamente algunos de sus activos, pero éstos siguen, en general, ahí. Los mercados financieros privados cometieron equivocaciones en gran escala al colocar el capital durante los años anteriores a la crisis y el despilfarro resultante de la subutilización de los recursos ha sido mayor incluso desde que comenzó la crisis. La cuestión es cómo poner de nuevo a trabajar dichos recursos.
La reestructuración de la deuda –amortizar las deudas de los propietarios de viviendas y, en algunos casos, las de los gobiernos– será fundamental. Tarde o temprano, se hará, pero el retraso resulta muy costoso... y en gran medida innecesario.
Los bancos nunca han querido reconocer sus créditos fallidos y ahora no quieren reconocer las pérdidas, al menos no hasta que puedan recapitalizarse mediante sus beneficios comerciales y el gran margen entre sus altos tipos de interés y los mínimos costos de su endeudamiento. El sector financiero presionará a los gobiernos para lograr el pago completo, aunque provoque un despilfarro social en gran escala, un enorme desempleo y un gran sufrimiento social... e incluso cuando sea consecuencia de sus errores en la concesión de créditos.
Pero, como sabemos por experiencia, no se acaba la vida después de la reestructuración de la deuda. Nadie desearía a cualquier otro país el trauma por el que pasó la Argentina en 1999-2002, pero este país también padeció en los años anteriores a la crisis –años de rescates por parte del FMI y de austeridad– a consecuencia de un enorme desempleo y tasas de pobreza y crecimiento bajo o negativo.
Desde la reestructuración de la deuda y la devaluación de su divisa, la Argentina ha tenido años de crecimiento del PIB extraordinariamente rápido, de casi el 9 por ciento por término medio de 2003 a 2007. En 2009, la renta nacional era el doble que en el peor momento de la crisis, en 2002, y más del 75 por ciento más que en el momento mejor del período anterior a la crisis.
Asimismo, la tasa de pobreza de la Argentina se ha reducido en unas tres cuartas partes en relación con el momento peor de su crisis y este país capeó la crisis financiera mundial mucho mejor que los EE.UU.: el desempleo es elevado, pero, aun así, no supera el 8 por ciento. Sólo podríamos conjeturar lo que habría ocurrido, si no hubiera aplazado el día del juicio final durante tanto tiempo... o si hubiese intentado retrasarlo aún más.
Así, pues, ésta es mi esperanza para el nuevo año: que dejemos de prestar atención a los supuestos magos financieros que nos metieron en este embrollo –y que ahora piden austeridad y una reestructuración retardada– y empecemos a usar un poco el sentido común. Si tiene que haber sufrimiento, el mayor deben arrostrarlo los responsables de la crisis y quienes más se beneficiaron de la burbuja que la precedió.
Joseph E. Stiglitz es profesor en la Universidad de Columbia y premio Nobel de Economía. Su ultimo libro, Freefall: Free Markets and the Sinking of the Global Economy(“Caída libre. Los mercados libres y el hundimiento de la economía mundial”), está traducido al francés, al alemán, al japonés y al español.